¿Cualquier persona puede meditar?

 

Si, cualquier persona puede meditar, puedes practicarla donde quieras, después de levantarte, esperando en una cita, en el camino a tu trabajo o universidad, en una reunión, mientras trabajas o antes de dormir, separa ese momento que esta dedicado exclusivamente para ti.

La meditación no solo es para relajar y reducir el estrés, ayuda a profundizar en tu mente y cuerpo, En el proceso de la meditación concentras tu atención y eliminas los pensamientos confusos, produciendo un estado de relajación profundo, calma, paz, equilibrio y mente tranquila.

La meditación puede ayudarte a aprender a mantenerte centrado y a conservar la paz interior.

 

  • Tener una nueva perspectiva de las situaciones estresantes
  • Adquirir habilidades para controlar el estrés
  • Aumentar la autoconciencia
  • Enfocarse en el presente
  • Reducir las emociones negativas
  • Aumentar la imaginación y la creatividad
  • Aumentar la paciencia y la tolerancia
  • Bajar la frecuencia cardíaca
  • Bajar la presión arterial en reposo
  • Mejorar la calidad del sueño

 

 

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Ten en cuenta:

  • Concentrar la atención. Puedes concentrar la atención en cosas como un objeto específico, una imagen, un mantra, o incluso la respiración.
  • Respiración relajada. El propósito es hacer la respiración más lenta, recibir más oxígeno, y reducir el uso de los músculos de los hombros, el cuello y la parte superior del pecho al respirar, para respirar con más eficiencia.
  • Un lugar tranquilo.Si eres principiante, practicar meditación será más fácil si estás en un lugar tranquilo con pocas distracciones, incluyendo sin televisión, radio o teléfono celular.
  • Una posición cómoda. Trata de tener una buena postura durante la meditación, sea sentado, acostado o caminando.
  • Actitud abierta. Permite que los pensamientos pasen por la mente sin juzgarlos.

Estas son algunas formas de meditar por tu cuenta, cuando quieras:

  • Respira profunda. Dirige toda tu atención a la respiración, concéntrate en lo que sientes y lo que oyes al inhalar y exhalar por la nariz. Respira profundamente y despacio. Cuando te distraigas, vuelve suavemente a prestar atención a tu respiración.
  • Observa tu cuerpo. Dirige tu atención a las diferentes partes del cuerpo y a las sensaciones corporales, ya sea dolor, tensión, calor o relajación.
  • Repite un mantra. Crea tu propio mantra, ya sea religioso o no.
  • Camina y medita. Camina mientras medites, reduce la velocidad y concéntrate en cada movimiento de tus piernas o pies, concéntrate en lo que ves, hueles y escuchas.
  • Enfoca tu amor y bondad. Piensa en los demás con sentimientos de amor, compasión y bondad.